La cultura forma parte de nuestra sociedad todos los días. Músicos, bailarines, pintores, escultores, escritores y muchos otros enriquecen con su arte a nuestra sociedad mendocina todos los días, muchas veces pasando desapercibidos por el resto.
En nuestra provincia, para la gran mayoría de los artistas locales, es bastante complicado conseguir un espacio de difusión en los más importantes medios de comunicación de Mendoza. Ya sea por desidia, desinterés u otras causas, los medios son reacios para acceder a difundir muchos espectáculos que no son considerados de "importancia" por ellos. No hablo del caso de las conocidas "agendas culturales" (que se encuentran casi exclusivamente en la prensa gráfica), sino de verdaderas notas que muestren de qué se trata lo que el artista quiere compartir.
Para compensar parcialmente esa falta de difusión, los artistas recurren a las redes sociales y a medios que no son de alcance masivo (como los comunitarios o páginas web independientes, entre otros). Además, sigue siendo muy utilizado el método del "boca a boca" y la publicidad callejera. Lamentablemente, estas herramientas no son lo suficientemente poderosas y masivas como para que el artista logre darse a conocer de manera popular.
Hay que tener en cuenta que numerosos actores, bailarines, músicos y demás no están interesados en darse a conocer a grandes cantidades de público y que disfrutan brindar su arte sólo a quienes se interesan por él (suele ser el caso de pintores y escultores). Mientras que por el contrario, son muchos los artistas que sí desean repercusión popular y tratan de lograrlo a fuerza de trabajo y perseverancia, a través de representantes o agentes de prensa (los que pueden), o de manera personal.
A todo esto hay que sumarle el comportamiento del Estado con respecto a la difusión de la cultura local. Tanto desde el gobierno provincial como de los municipales se realizan campañas de difusión para promover el acercamiento de los ciudadanos hacia los artistas mendocinos. Pero sólo abarca a los espectáculos y muestras que se realizan en ámbitos públicos, es decir, se difunde sólo lo que está organizado y auspiciado por los gobiernos. Fuera de éstos lugares, la ayuda hacia los demás sectores culturales es escasa, por no decir nula, y eso hace que el artista no consiga resguardo para difundir su arte.
Es hora que tanto las autoridades como los medios de comunicación masivos comiencen a preocuparse verdaderamente de difundir y acompañar a los artistas que deseen darse a conocer de manera masiva y popular, y que los artistas no tengan que mover "cielo y tierra" para conseguirlo.
Mientras tanto, todos aquellos que deseen difundir su arte deben aprovechar las oportunidades que hoy nos brinda la tecnología, y no creer en que la espera inmóvil dará sus frutos. Para conseguir lo que se desea, hay que ir a buscarlo.
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